Es desmayarse de hambre. Y díjose de «hila», una delgada tripa, y esta, por henchirse de ventosidad, o por secarse, causa pena al que está sin comer y, algunas veces, cerca de los latinos, significa cualquiera tripa. Y ahilado se dice el que está transido de hambre. También decimos ahilarse el pan y estar ahilado cuando se amasó con mala sazón, por falta o sobra de levadura, o por la demasiada agua con que se amasó, o por estar mal cocido, y es por el hilo de una raya parda que se hace en medio del pan.